Casi sin darnos cuenta, en especial después de tanta celebración y fiestas patrias, se nos vino encima octubre... mes marcado por las elecciones municipales, comicios que serán muy distintos por dos motivos fundamentales.
En primer lugar, será la primera votación en nuestro país con inscripción automática y sufragio voluntario, lo que supone la posibilidad de que más de cinco millones de chilenos y chilenas (5.276.844, para ser exactos) vayan por primera vez a las urnas. En total , más de quince millones de potenciales electores, lo que supone una gran incertidumbre para candidatos de todos los sectores políticos. ¿Cuántos antiguos inscritos dejarán de votar, al no tener la amenaza de una multa de por medio? ¿Cuántos nuevos electores se sentirán atraídos por las candidaturas a alcaldes y concejales? Ya tendremos respuesta a estas preguntas, junto a todo el análisis y proyección de resultados, con miras a las parlamentarias y presidenciales del próximo año.
En segundo término, estas municipales estarán marcadas también por un control inédito que ya están ejerciendo los propios ciudadanos hacia sus futuros representantes. Con más teléfonos celulares que número de habitantes, hoy en cada rincón de Chile existe lo que los medios de comunicación ya han bautizado como "reporteros ciudadanos".
En la práctica, informadores de cualquier hecho que llame la atención: desde un candidato que reparte billetes a sus vecinos, hasta otros que buscan la reelección utilizando recursos fiscales. Lo particular de cada una de esas denuncias es que hoy existe el potencial para difundirlas en breve tiempo con un impacto incalculable. Una foto en Twitter, un video en You Tube o un posteo en Facebook puede significar el éxito o el derrumbe de una campaña.
Con ambos elementos, una mayor participación ciudadana y mejores mecanismos de control, tenemos la oportunidad de renovar modelos que a veces no nos representan, que han dañado los anhelos de nuestra comunidad o confirmar aquellos que nos parecen van de acuerdo a nuestros principios y valores. Expresar nuestros puntos de vista sobre lo que creemos mejor para el desarrollo del país no es solo una muestra de derecho a la libertad de expresión. La construcción política y social de un país se da cuando todos los gobernados tenemos la oportunidad de opinar sobre la conducción del mismo y en ese sentido el voto es una herramienta seria y responsable para participar.
Mauricio Bustamante, periodista
@tvn_mauricio
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